La Sala de Arte Público, respondiendo a su vocación de puente entre la modernidad y el arte actual, pretende centrar su atención en la investigación de la obra del muralista mexicano a través de tres acciones puntuales: la restauración de los murales que se encuentran en nuestra sala y corresponden a su último período de trabajo, la digitalización del archivo documental bajo nuestra custodia, y la posible búsqueda de discursos actuales que puedan problematizar conceptos paradigmáticos en relación al pensamiento de David Alfaro Siqueiros.
Complejizar prácticas y estrategias artísticas contemporáneas afines a la dimensión pública del arte, su carácter social y la inmersión en lo político, así como el constante desafío ante las estructuras mediáticas, serán los ejes discursivos que abarcaremos en los próximos años de trabajo. Así, la producción artística transgresora y la generación de debates y foros afines a la alteridad discursiva, permitirán reforzar el perfil institucional de esta sala de arte.
La SAPS, ubicada en Polanco y La Tallera Casa Estudio en Cuernavaca, fueron legados mediante testamento público por David Alfaro Siqueiros (1896-1974) al “pueblo de México”, junto con una importante colección de obra de caballete, gráfica, dibujo, estudios y proyectos murales, así como su archivo personal y biblioteca.
El 12 de diciembre de 1973, 25 días antes de morir, expresó su deseo de que en éstos espacios se preservaran y difundieran sus obras e ideas; que fueran centros de análisis y de experimentación para el “arte público” del porvenir.
Hoy en día, la Sala de Arte Público Siqueiros es un museo, un centro de consulta e investigación, pero también es la sede de innumerables conferencias y mesas de discusión sobre arte contemporáneo. La SAPS ha abierto su espacio al arte contemporáneo para dar continuidad a las inquietudes técnicas y temáticas del muralista.